Conoce los mejores ejercicios para relajarse, a veces en el transcurso de un día, sentarse, encadenar reuniones, productividad, órdenes de su supervisor puede causar estrés y ansiedad; para combatir el sufrimiento en el trabajo, para reservar un tiempo personal para ti mismo, para relajarte y aflojar tus músculos, pero también para despejar tu mente, existen algunos consejos y ejercicios para relajarse que puedes hacer hacer en tu lugar de trabajo.
Para relajar los músculos y los nervios, es necesario tomarse unos minutos para despertar el cuerpo entumecido.
Ejercicios para relajarse primera etapa
Aquí hay algunos ejercicios físicos para hacer tantas veces como sea necesario:
Ejercicio 1
Extiende los brazos frente a ti, entrelazando las manos, con las palmas hacia afuera.
Extiende los brazos hasta el final, baja los hombros y estira la parte superior de la espalda.
Mantén la posición por unos segundos, este es uno de los más sencillos ejercicios para relajarse.
Ejercicio 2
Mantén los dedos cruzados detrás de tu cuello.
Inclina la cabeza alternativamente a la izquierda, luego a la derecha, hacia atrás y hacia adelante.
Ejercicio 3
Pon tu mano derecha en tu codo izquierdo, lleva tu brazo de vuelta al pecho.
Inclina la cabeza hacia la izquierda, mantenga la posición durante unos segundos. Repita cambiando de brazo.
Descanso para tus ojos
Para aquellos que tienen que pasar largas horas frente a la pantalla de un ordenador, aquí hay un simple ejercicio para relajar los ojos, lo puedes hacer varias veces al día:
Quítate las gafas o los lentes de contacto.
Cierra los párpados y dibuja con los ojos detrás de los párpados cerrados el signo del infinito en una dirección (10 veces), y luego en la otra.
Ejercicios para relajarse segunda etapa
La relajación te permite recuperar la armonía.
En tu lugar de trabajo, puedes tomar un descanso de cinco minutos y hacer algunos ejercicios basados principalmente en la respiración:
Ejercicio 1
Cierra los ojos, e inspira y espira mientras exhalas.
Visualiza tus pies y sube por tu cuerpo, recordando todas las partes: tobillos, pantorrillas, muslos, ingle, vientre, pecho, brazos, cuello y cabeza.
Entonces vuelve a bajar por el cuerpo.
Recuerda respirar despacio, este puede ser uno de los mejores ejercicios para relajarse que puedes practicar.
Ejercicio 2
Practicar la respiración abdominal: al inhalar, empujar el vientre hasta el fondo, y al exhalar, empújalo.
Esta respiración también relaja los intestinos, el estómago y el abdomen si eres propenso a los espasmos o a los dolores de estómago, uno de los mejores ejercicios para relajarse.
Ejercicio 3
Escucha unos minutos la música relajante que desees, cierra los ojos e imagínate en el lugar de tus sueños.
Deja volar tu imaginación por unos minutos y luego vuelve a la realidad.
Ejercicios para relajarse tercera etapa
Frota tus manos vigorosamente hasta que se calienten.
Luego coloca las palmas de tus manos en tus párpados cerrados.
Respira con calma hasta que tus palmas se enfríen.
Ejercicio 1
Practica auto-masajes (que se hace inhalando y exhalando suavemente).
Las sienes, coloca la punta de los dedos índice y medio a cada lado de la frente en las sienes.
Mientras se ejerce una ligera presión, haz pequeños círculos de adelante hacia atrás sin mover la punta de los dedos: es la piel la que debe moverse ligeramente.
Dos círculos en una dirección y dos en la otra.
Mientras lo haces, siente cómo se relajan tus párpados y también la frente.
El plexo, coloca las puntas de tus tres dedos (índice, medio y anular) en el plexo (donde las costillas se extienden en el medio del pecho).
Usando una ligera presión, haz pequeños círculos en el sentido de las agujas del reloj sin mover la punta de los dedos: la piel debe moverse ligeramente.
Observa cómo tu respiración se ralentiza y cómo tu cuerpo se relaja en el diafragma, las vísceras y los pulmones.
Ejercicio 2
El siguiente ejercicio es más gradual y progresivo.
Espera hasta que tengas un momento en el que no sea probable que te interrumpan para dejarte llevar.
Este ejercicio consiste en envolver los músculos uno por uno y luego relajarlos repentinamente.
Ponte cómodo, de pie, sentado o acostado.
Paso 1
Comienza apretando el puño derecho con mucha fuerza, hasta que el calor pase por tus dedos, el dorso de tu mano, tu muñeca, tal vez todo el brazo.
Luego afloja tu puño de una sola vez: sentirás una sensación de hormigueo mientras la tensión desaparece.
Mantén tu mano relajada.
Paso 2
Ahora aprieta el puño izquierdo; de la misma manera que apretaste el puño derecho, siente el calor invadir tus dedos, el dorso de tu mano, tu muñeca, quizás todo tu brazo.
Luego, afloja tu puño de una sola vez: sentirá una sensación de hormigueo mientras la tensión desaparece.
Mantén tu mano relajada.
Paso 3
Continúa el ejercicio contrayendo y luego relajando todos los músculos del cuerpo de la misma manera: brazos, frente, ojos, boca, mandíbula, labios, cuello, hombros, pecho, estómago, pantorrillas.
Este sin duda es uno de los mejores ejercicios para relajarse.