Si deseas saber para qué sirven las semillas de moringa y conocer algunos de los increíbles beneficios para la salud que estas ofrecen, continúa leyendo. Las semillas de moringa se obtienen de las vainas del árbol de moringa (Moringa Oleifera) o del árbol de vara, nativo del norte de la India. Las semillas de moringa frescas y crudas son bastante blandas, pero tan pronto como se secan, se vuelven duras y tienen el aspecto de ser de color blanco grisáceo con estructuras únicas en forma de ala, pueden ser cocidas al vapor, hervidas o asadas para una variedad de propósitos.
La moringa es una planta rica en vitaminas, calcio, hierro y aminoácidos. Preparado que a continuación se muestra para que sirven las semillas de moringa con algunos beneficios que tal vez no te imaginabas.
¿Para qué sirven las semillas de moringa?
Mejora el sueño
Te ayuda a dormir por la noche de una manera más fácil, y a su vez te da la energía que necesitas para pasar el día.
Alto en fibra
Las semillas de moringa son ricas en fibra y ayudan a transportar los alimentos a lo largo del sistema digestivo. Además de ayudarte a sentir más saciedad, es decir, gracias a la fibra que contiene te sentirás más satisfecho con menos alimentos, ideal si buscas perder peso.
Regulación de los niveles de azúcar en la sangre
Las semillas de moringa son una excelente fuente de zinc y pueden regular los niveles de azúcar en la sangre que pueden ayudar a controlar o incluso prevenir la diabetes. Ahora si alguien te pregunta para qué sirven las semillas de moringa, ya tendrás una noción, ¿cierto? Pero continuemos con más beneficios.
Gran fuente de hierro
¿Sabías que una sola porción de moringa tiene casi tres veces más hierro que las espinacas? Esto es especialmente importante para los vegetarianos/veganos o aquellos que sufren de problemas de hierro porque el cuerpo necesita hierro para enriquecer la sangre y transportar el oxígeno a nuestros músculos, órganos y tejidos.
Reduce el dolor de las articulaciones
Las semillas de moringa son un excelente suplemento de calcio y ayudan a las personas con dolores articulares a reducir la inflamación y los trastornos óseos graves como la artritis.
Reduce el colesterol
Se sabe que algunas plantas revierten el colesterol malo y, según las investigaciones, la moringa está entre ellas.
Induce la muerte de las células cancerígenas
Las semillas de moringa son bien conocidas por sus efectos anticancerígenos. Pueden detener el crecimiento y el desarrollo de las células cancerígenas acelerando su tasa de mortalidad.
Promueve la salud del corazón
Los científicos han demostrado que las semillas de moringa pueden reducir la cantidad de lípidos oxidados en nuestros cuerpos y cuidar de nuestra salud cardíaca protegiendo el tejido cardíaco de daños estructurales. Una excelente y rica opción para tener un corazón sano.
La potencia antioxidante
El aceite extraído de las semillas de moringa contiene casi 30 antioxidantes y contiene vitaminas A, B, C y otros inhibidores de los radicales libres que protegen nuestros cuerpos de daños oxidativos graves, en otras palabras, estas propiedades antioxidantes de las semillas de moringa.
Promueve una piel sana
Las semillas de moringa son ricas en antioxidantes, antiinflamatorios y antisépticos y, por lo tanto, son muy beneficiosas para el cuidado de la piel. El aceite obtenido de las semillas de moringa puede utilizarse como hidratante o para tratar problemas de la piel como erupciones y quemaduras solares.
Ahora que ya sabes para que sirven las semillas de moringa no dudes en consumirlas, pero recuerda no abusar de ellas, ya que, como en todos los casos, el exceso resulta ser negativo para el cuerpo.